La revolución cubana tuvo repercusiones contradictorias sobre la economía. Por un lado, animó a quienes veían en el antiimperialismo y en el socialismo el camino al crecimiento y reforzó el intervencionismo estatal; por Otro, potenció las tendencias a favor del mercado. La creciente participación del Estado en la economía provocó la mayor crisis conocida en todo el siglo, la de la deuda externa. El modelo cubano tuvo en algunas áreas resultados por encima de la media y los malos resultados se atribuyeron al bloqueo norteamericano. La experiencia cubana tuvo la fuerza necesaria para evidenciar las contradicciones y las dificultades de la sociedades latinoamericanas.
La revolución cubana fue en un principio imitado durante la década de los sesenta por muchos grupos iberoamericanos que utilizaron la lucha armada y el foco guerrillero rural. La mayoría de los partidos comunistas iberoamericanos se pusieron en contra del movimiento revolucionario al ser más partidarios del frente populismo y el reformismo.
En el auge del autoritarismo y los regímenes militares la ocasión para la cual se había preparado al ejército surgió cuando Cuba, con el triunfo de la revolución, se mostró dispuesta a exportar su modelo por el hemisferio y nació la Tricontinental. La táctica era el “foquismo”, crear focos guerrilleros en zonas rurales para luego extender la lucha armada a todo el país y llegar al poder. Así, grupos guerrilleros históricos y nuevas guerrillas urbanas multiplicaron las acciones violentas
El triunfo de la revolución fue un estímulo para la izquierda insurreccional latinoamericana, que intentó crear focos guerrilleros rurales para la conquista del poder. El ejemplo de Castro y el Che Guevara prendió en América central, en los andes y en Brasil. En algunos casos, la convergencia de la izquierda revolucionaria, del nacionalismo anti imperialista y de cristianos partidarios de la lucha armada llevó a crear partidos procastristas. A fines del 64, el comunismo latinoamericano celebró una conferencia secreta en la Habana para discutir la metodología revolucionaria. Desde entonces, el régimen redobló sus esfuerzos para exportar la revolución al continente y a comienzos del 66, se reunió en la Habana la primera conferencia tricontinental de solidaridad revolucionario. En el 67 se creo las OLAS, Cuya primera reunión plasmó la ruptura entre el castrismo revolucionario y el reformismo comunista y también puso de manifiesto la voluntad de las organizaciones revolucionarias .latinoamericanas de extender la lucha armada por el campo y las ciudades.
Venezuela conoció durante los años 50 y 60 un fortísimo movimiento guerrillero, influenciado por el marxismo-leninismo en su versión castrista. La oposición armada era la única posibilidad de lucha de aquellos que deseaban acabar con las oligarquías reinantes, que dominaban mediante dictaduras o regímenes constitucionales.
En Colombia, con una Constitución desde 1886, se han sufrido numerosas guerras civiles. Cabe destacar la de los “mil días”, con gran número de pérdidas humanas y económicas.
Los acontecimientos de 1948 desembocaron en el llamado “bogotazo” y dieron lugar a la actividad guerrillera a gran escala. En los sesenta, con el agotamiento del sistema político y el ejemplo de la revolución cubana, aparecieron las guerrillas rurales
Cuba, con su falta de recursos, poco pudo ayudar a estos movimientos guerrilleros. Sólo sirvió como centro de formación e instrucción Sus acciones militares, controladas por la Unión Soviética, sólo se desarrollaron en Angola y Etiopía. Sólo exportó su foco guerrillero a Bolivia en la persona del Che Guevara, que ignoró la realidad económica, social y política del país, con lo que su fracaso fue evidente, produciéndose su muerte en 1967.